Cuando la princesa Isabel, de 25 años, fue proclamada reina el 6 de febrero de 1952, el Imperio Británico se extendía por todo el mundo, la realeza era ampliamente reverenciada y los televisores seguían siendo una novedad.
El mundo ha sufrido profundos cambios desde entonces y también la monarquía. El imperio de la reina Isabel II se contrajo y luego se desmoronó. Si bien la mayoría de las personas en Gran Bretaña siguen siendo leales a la reina y respetan sus años de servicio a la nación, las actitudes hacia la monarquía han pasado de la deferencia incondicional al escrutinio. En la década de 1980, la princesa Diana trajo el poder mundial de las estrellas a la Casa de Windsor, pero también marcó el comienzo de una era en la que la familia real se vio obligada a negociar una relación incómoda con los medios.
Durante su reinado de 70 años, la reina, a veces de mala gana, supervisó la modernización de la familia conocida como "La Firma" y su adaptación a las expectativas cambiantes.
Mientras Gran Bretaña marca el Jubileo de Platino del monarca de 95 años el domingo, aquí hay un vistazo a algunos momentos clave de cambio:
1953: LA CORONACIÓN DE ISABEL Y LA ERA DE LA TELEVISIÓN
El 2 de junio de 1953, la coronación de Isabel en la Abadía de Westminster fue la primera vez que la mayoría de la gente vio un evento en vivo por televisión. Millones de personas en todo el mundo vieron la ceremonia por televisión, superando en número a la audiencia de radio por primera vez.
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